Wow, han pasado cuatro años desde que escribí algo como el Gastrónomo Imprudente, así que por favor perdónenme si estoy un poco fuera de práctica. ¿Qué me podría hacer volver a escribir, se preguntarán? ¿Se ha roto el séptimo sello y mis poderes regresan? ¿Alguien ha dicho mi nombre al revés tres veces mientras sostenían una vela frente a un espejo? ¿Mi hermano menor me rogó que escribiera algo para su nueva página web de noticias? El mundo tal vez nunca lo sepa. En cualquier caso, usted se encuentra aquí por mi (una lágrima solitaria me corre por la cara),
¡empecemos la crítica!
Coca-Cola Clear Lime nos llega desde Japón, donde Coca-Cola Clear es una versión dietética de Coca-Cola que ha eliminado el caramelo y ha agregado los villanos dietéticos habituales de sucralosa y acesulfamo de potasio, además de un poco de sabor a limón para compensar. Aquí es donde se complica la cosa, como la trama de Neon Genesis Evangelion. Coca-Cola Clear Lime no es una gaseosa dietética, contiene a nuestro viejo amigo, el jarabe de maíz alto en fructosa y reemplazó el sabor a limón con lima. Básicamente, de-dietizaron la gaseosa dietética, pero decidieron poner una imagen de la gaseosa oscura regular en la etiqueta por razones que no puedo comenzar a comprender. Entonces, ¿dónde nos deja todo este Full Metal Alchemy? Nos deja con una gaseosa Sprite que le falta el limón. Claramente le falta una nota (pero afortunadamente no una Nota Mortal) que no quiere decir que sea mala, simplemente incompleta como si necesitara otro sabor para darle algo de profundidad. Con el propósito de plena divulgación, admitiré que a la botella que obtuve le faltaba un poco de carbonización, por lo que existe una clara posibilidad de que un poco más de carbonización hubiera hecho que el sabor se destacara un poco más (juego de palabras hecho a propósito).
Por Martin Peyruc
Encontrado por mi hermano (tendré que preguntarle de donde)
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